Riesgo de suicidio y enfermedad crónica

En los últimos 15 años la tasa de suicidios ha aumentado un 24% en los EE.UU., con más de 45.000 personas muertas cada año. Una nueva investigación publicada en American Journal of Preventive Medicine, ha encontrado que 17 enfermedades o condiciones médicas crónicas - como por ejemplo; diabetes, enfermedades del corazón, dolor de espalda, etc. - están asociadas a un mayor riesgo de suicidio.

Detección del riesgo de suicidio en el ámbito sanitario

Mientras que la cantidad de muertes producidas por otras causas ha ido disminuyendo en los últimos años, el suicidio sin embargo continúa en tendencia creciente en todos los rangos de edad y sin distinción entre sexos. Muchas de las personas que se suicidan no han recibido ningún diagnóstico previo por problemas de salud mental, lo que implica que muchos de los potenciales suicidas no son detectados por el personal sanitario.

Para esta investigación, se realizó un estudio de caso-control, con una muestra de 2.674 personas que murieron por suicidio entre los años 2000 y 2013, junto con otras 267.400 personas como grupo de control, a través de ocho sistemas de salud de la Red de Investigación de Salud Mental.

Enfermedades crónicas asociadas a un mayor riesgo de suicidio

Los resultados mostraron que de las 19 condiciones médicas estudiadas, las siguientes 17 estaban relacionadas con un aumento significativo del riesgo de suicidio:

• asma.
• dolor de espalda.
• lesión cerebral.
• cáncer.
• insuficiencia cardiaca congestiva.
• enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
• diabetes.
• epilepsia.
• SIDA.
• enfermedades del corazón.
• hipertensión.
• migraña.
• enfermedad de Parkinson.
• dolor psicogénico.
• enfermedad renal.
• trastornos del sueño.
• accidente cerebrovascular.

Si bien todas estas condiciones médicas se mostraron asociadas a un mayor riesgo, algunas de estas condiciones mostraron un mayor riesgo de suicidio que otras.

A modo de ejemplo, en condiciones como trastornos del sueño o el SIDA el riesgo de suicidio es el doble, mientras que en el caso de una lesión cerebral por traumatismo el riesgo se multiplica por nueve. Para los investigadores, este dato en concreto implica que los esfuerzos de prevención deberían de hacer especial hincapié en estos pacientes con una lesión cerebral traumática. De hecho, este es el primer estudio grande con población general de los EEUU que demuestra que existe una relación significativa y de importancia entre las lesiones cerebrales y el riesgo de suicidio.

Del mismo modo, sufrir varias de estas condiciones a la vez, también aumenta el riesgo considerablemente.

Prevención del riesgo de suicidio en el ámbito sanitario

Para los investigadores, la atención especifica en las consultas de atención primaria y en la atención especializada podrían ser la clave para prevenir los suicidios. Se sabe que alrededor del 80% de las personas que se suicidan han tenido alguna visita médica durante los 12 meses anteriores a su muerte, y hasta el 50% han ido alguna vez al médico durante las 4 semanas anteriores a la fecha de su suicidio. Además, debido a que a la mayoría de estas personas no se les diagnostico ningún problema de salud mental, limitar los esfuerzos de prevención del suicidio a entornos de salud mental es un error.

Teniendo en cuenta que varias de las mencionadas condiciones médicas, como el dolor de espalda, los trastornos del sueño y la lesión cerebral traumática se diagnostican con bastante frecuencia y además incrementan el riesgo de suicidio, los pacientes con estas patologías deberían de ser objetivos primarios para las campañas de prevención del suicidio. Es más, viendo que de las condiciones estudiadas, la mayoría mostraron aumentar el riesgo de suicidio, no sería nada descabellado generalizar las campañas de prevención a todos los usuarios de los servicios de sanidad.

Los investigadores se muestran esperanzados en que los resultados del estudio pueda servir para desarrollar nuevos protocolos de intervención que ayuden a prevenir más muertes.

Detectar si alguien quiere suicidarse

Aunque muchas personas hacen intentos de suicidio como forma de llamar la atención, es muy importante no infravalorar el riesgo de suicidio de una persona. Si estás leyendo este artículo porque conoces a alguna persona que crees que podría querer suicidarse, es muy importante que pongas a su disposición el máximo posible de recursos para prevenir el suicidio.

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