¿Son peligrosos los antidepresivos a largo plazo?

Según una nueva y provocadora investigación publicada en la revista Psychotherapy and Psychosomatics, y realizada por investigadores de la Universidad McMaster y de la Universidad de Toronto, los medicamentos habitualmente usados como antidepresivos a largo plazo aumentan el riesgo de morir.

Consecuencias de tomar antidepresivos a largo plazo

Según explican los investigadores de este estudio, los antidepresivos más comunes evitan que las células de nuestro cuerpo puedan absorber la serotonina. En el cerebro, la serotonina afecta a los estados de ánimo y el efecto que tienen los antidepresivos al dificultar la reabsorción de la serotonina por parte de las neuronas es exactamente el efecto deseado, ya que ayuda a mejorar los síntomas depresivos.

Sin embargo, la serotonina no solo está presente en el cerebro. De hecho, gracias al aporte que suministra el torrente sanguíneo, se encuentra presente en los principales órganos del cuerpo humano (corazón, pulmones, hígado, riñones, etc.).

¿Son peligrosos los antidepresivos a largo plazo?

Según estos investigadores, el bloqueo de la absorción de la serotonina en estos otros órganos podría provocar un aumento en el riesgo de mortalidad al impedir el correcto funcionamiento de dichos órganos.

Para esta investigación, los científicos revisaron estudios que en total sumaban cientos de miles de personas y encontraron que los usuarios de antidepresivos a largo plazo tenían un 33% más de probabilidades de morir que las personas que no toman antidepresivos. Además, los usuarios de antidepresivos, también tenían un 14% más de riesgo de problemas cardiovasculares, como por ejemplo, apoplejías o ataques cardíacos.

Para los investigadores estos resultados son muy preocupantes, y creen que no se deberían de prescribir estos medicamentos sin entender exactamente cómo interactúan con el cuerpo humano.

Uso de antidepresivos a largo plazo

Los antidepresivos se encuentran entre los fármacos utilizados con mayor frecuencia. A modo de ejemplo, en Estados Unidos de América, uno de cada ocho adultos los toman. Desafortunadamente, con demasiada frecuencia, estos fármacos son recetados por médicos de familia sin tan siquiera un diagnostico formal de depresión, asumiendo que se trata de medicamentos seguros.

Debido a que la depresión en si misma ya provoca un mayor riesgo de mortalidad - las personas con depresión sufren un mayor riesgo de suicidio - muchos médicos piensan que los antidepresivos salvan vidas al reducir los síntomas depresivos.

Para los investigadores, los hallazgos de este estudio desmienten esta creencia sobre la supuesta seguridad de los antidepresivos. Defienden que los pacientes estarían menos dispuestos a tomar estos medicamentos si supieran lo poco que se sabe realmente sobre el impacto de estos fármacos fuera del cerebro, por no hablar del mayor riesgo de morir que se desprende de los hallazgos de este estudio.

Resulta pues, totalmente imprescindible mejorar nuestro conocimiento sobre cómo funcionan realmente estos antidepresivos. Los investigadores de este estudio creen que se prescriben antidepresivos sin saber si son más dañinos que útiles a largo plazo y que dentro de 50 años los psiquiatras se preguntarán por qué no se hizo más para averiguarlo.

Antidepresivos a largo plazo y enfermedades cardiovasculares

Curiosamente, no todo son malas noticias con respecto a los antidepresivos. En este estudio los investigadores no encontraron una asociación significativa entre su uso y un mayor riesgo para las personas que padecen enfermedades cardiovasculares o las que sufren diabetes.

Esto tiene cierto sentido ya que los antidepresivos tienen ciertos efectos beneficiosos en la sangre de dichos pacientes y por lo tanto resultan útiles para el tratamiento de dichos trastornos. Sin embargo, esto también significa que para la mayoría de personas que no tienen dichos problemas de salud cardiovascular, estos efectos en la sangre podrían ser perjudiciales.

Tratamiento de la depresión con antidepresivos a largo plazo

Aunque los antidepresivos se han mostrado útiles en el tratamiento de la depresión, se corre el riesgo de cronificar su uso a largo plazo. Por ello es importante disponer también de una adecuada terapia psicológica para complementar el tratamiento.

No hay que olvidar que, como sucede con otras enfermedades, los antidepresivos a veces se limitan a tratar los síntomas, sin tratar adecuadamente la causa del problema. A modo de ejemplo, se puede decir que a veces funcionan como unas muletas ortopédicas, nos ayudan a caminar, pero si no hacemos nada para sanar el hueso roto, las seguiremos necesitando siempre. Es por ello que en muchos casos, la terapia farmacológica no es suficiente.

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Fuente: Universidad McMaster